¿Qué he aprendido? Pues … ¡que el estrés no es bueno!

Todo el mundo me lo decía y yo también estaba segura de ello pero en mis adentros siempre pensaba – Algún día me saldrá una úlcera o me dará un mareo que me caeré redonda – Pues no, bueno si, pero en vez de algo estomacal que con unos cuantos omeoprazoles y un poquito de régimen tiene solución ¡patapam! Carcinoma ductal infiltrante de mamá multicéntrico, Estadio I, o sea, cáncer de mama.

blog Susín-06El año 2015 fue uno de los años más duros de mi vida. Arrancamos junto con mi marido y unos amigos una empresa nueva, murió un ser muy querido para mi con un final doloroso y triste, obramos en casa y me hice un esguince con derrame en el tobillo. Las reuniones de trabajo y los nervios derivados de la toma de decisiones importantes me “mataban”. La cara se me ponía color grana y por la tripa me subía un intenso calor que me abrasaba las entrañas. Yo sabía que me iba a poner enferma, pero lo que NUNCA pensé es que el cáncer fuera el diagnóstico final.

¿Qué he aprendido? Pues .. ¡que el estrés no es bueno! Durante la enfermedad, me he dado cuenta del gran poder que tiene la mente. Estos meses mi prioridad ha sido la lucha contra el cáncer y, aunque los problema siguen y los obstáculos que la vida te va poniendo no paran de aparecer, ahora mi mente actúa ante ellos de manera diferente.

He pasado por la enfermedad de refilón y soy muy consciente de ello. He conseguido derrapar y salir del camino de peregrinación a gran velocidad, pero aún así, he visto los peligros y dificultades que se presentan. Soy consciente de la suerte que tengo y de lo importante que es mantener una cierta objetividad ante los problemas de la vida, porque si no lo haces así, se te comen y desapareces.

YO ya no era YO desde hacía bastante tiempo.

He tenido mucha suerte y doy gracias. Ahora, cuando ante una situación de estrés el corazón se me acelera y las manos me empiezan a temblar, cierro los ojos, respiro, relajo todos mis músculos y me situo a distancia. A veces, necesito una parada un poquito más larga de lo normal para ver las cosas en perspectiva, pero al menos soy capaz de darme cuenta y actuar en consecuencia.

 

Rut Farrés. Cáncer de mama . 40 años